Revolución existencial
Agustín López Tobajas
De manera sorprendente,
quienes tan prestos están a explicarlo todo por razones sociológicas no parecen
encontrar ninguna relación entre los ideales progresistas -en el poder desde
hace décadas en todo el mundo occidental, aunque muchos no se quieran enterar e
independientemente de las irrelevantes diferencias entre los partidos que
gobiernan- y la descomposición galopante de la estructura social. Quieran verlo
o no los progresistas de izquierdas -a los que, a diferencia de sus
correligionarios de derechas, les gusta creerse permanentemente en la
oposición- la única rebelión posible, la única decisiva en todo caso, ya no se
sitúa en el campo de una izquierda sin identidad sino en el de la lucha contra
el Progreso, y por tanto tendrá que ir dirigida, no sólo pero también,
precisamente contra ellos. Revolución, en todo caso, no política sino
existencial, como necesario fermento de una metamorfosis colectiva que no tiene
más marco que la escatología, única esperanza razonable para la humanidad, pues
la ciudad ideal no puede ser realizada en la historia.
(Agustín López Tobajas, Manifiesto contra el progreso, J. J. de Olañeta Editor, Palma de Mallorca, 2005, pp. 73-74).