lunes, 27 de mayo de 2013

Fuera matones de las redes sociales


Fuera matones 

de las redes sociales


Halil Bárcena






Decía Frithjof Schuon que lo exclusivamente humano, lejos de poderse mantener en equilibrio, conduce siempre a lo infrahumano. Cuando al vulgo le ponen en la mano un micro, un megáfono o un 'twiter' el infierno se abre bajo nuestros pies. Los que acosan, los que persiguen, los matones de las redes sociales, construyen día a día el infierno a base de difamaciones. Somos lo que decimos, afirman los sufíes, maestros del verbo exquisito y el adab o educación espiritual, algo que tendría que tener cabida en las nuevas formas de comunicación social, pero que apenas si cabe. El periodista y escritor italiano Roberto Saviano escribía recientemente acerca,justamente, de dichos matones de las redes sociales (El País, sábado 25 de mayo de 2013, p. 33):


"Insultar en las redes sociales no es libertad de expresión, sino una manera de difamar de gente que se nutre, como parásitos, de la fama de los demás y no construye una sociedad más sincera, sino peor (...). Nosotros somos lo que decimos. Por tanto el lenguaje soez, el insulto o la agresividad no construyen una sociedad más sincera sino una sociedad peor. Seguramente, más violenta. Los comentarios biliosos de los usuarios de Facebook y Twitter solo aportan bilis y veneno a las vidas de quien los escribe y de quien los lee. Por desgracia, esta entropía del lenguaje está contagiando a la comunicación política, siempre en busca de la gran simplificación, de la cháchara divertida y ligera, de la ocurrencia resolutoria".