Valor espiritual de la naturaleza
Frithjof Schuon

La naturaleza virgen es solidaria con la santa pobreza, y también con la infancia espiritual; es un libro abierto que contiene una enseñanza inagotable de verdad y de belleza. El hombre se corrompe más fácilmente en medio de sus propios artificios; éstos lo hacen ávido e impío; cerca de la naturaleza virgen, que no conoce agitación ni mentira, tiene el hombre oportunidad de permanecer contemplativo como la propia naturaleza. Y es la naturaleza total y casi divina la que, más allá de todos los extravíos humanos, tendrá la última palabra.
(Frithjof Schuon, El sol emplumado, J. J. de Olañeta editor, Palma de Mallorca, 1992, pp. 35-36).